lunes, octubre 01, 2007

DESHILACHADOS

Me resisto a que de mis ojos caiga así fuese una mínima lágrima. Nadie se lo merece, mejor, no me lo merezco, es más, no lo necesito. Hay una fuga en un pedazo de corazón, por donde sale un poco de tristeza comprimida, y mientras tanto, a la fuerza, entra un poco de tristeza nueva, incontrolable. Es el silencio que atasca las palabras, es no encontrar quién quiera escucharlas, es tener que sentirse adolorida sola, que todo esté en la cabeza, que haya explotado, que un poco de falta de sensatez se haya filtrado. Me resisto a las lágrimas, pese a que el corazón está indiscutiblemente desinflado, deshilachado, deshidratado, falto de amor.

No hay comentarios.: